miércoles, 18 de marzo de 2009

La Primera Guerra Mundial



LA Iª GUERRA MUNDIAL

1.- Política mundial y relaciones internacionales: la "paz armada".

Entre 1871 y 1914 en toda Europa había un sentimiento de que, tarde o temprano, se iba a producir un enfrentamiento entre países a escala europea.
Las relaciones internacionales europeas aparecían dominadas por dos grandes movimientos:
  • Colonialismo e imperialismo: El apogeo de la expansión europea en el mundo mediante la conquista colonial o la redistribución colonial (reparto del mundo de la época imperialista).
  • Nacionalismo: La afirmación de oposiciones entre Estados y dentro de los mismos, por la exaltación de intereses nacionales: desconfianza entre Estados y enfrentamientos internos de minorías nacionales que buscan su autodeterminación.


La explicación del proceso de antagonismos europeos que llevaron a la Iª Guerra Mundial es muy complejo puesto que obedece a múltiples factores:
  • La política exterior de los Estados se hace cada vez más compleja. Por primera vez en la historia se produce una interrelación entre ellos que compone una especie de rompecabezas o castillo de naipes que hace que, cuando una pieza se mueva pueda descomponerse o caer todo el conjunto.
  • La búsqueda de intereses particulares sin tener en cuenta los colectivos van a conducir a resquemores y enfrentamientos.
  • El establecimiento de una diplomacia secreta y un complejo entramado de alianzas va a crear una gran desconfianza entre los Estados.

Para entender mejor esto, dividiremos este período en diferentes fases:


Napoleón III
  • De 1851 a 1870: la Europa de Napoleón III.
Las relaciones internacionales de este período están dominadas por Francia, que desea intervenir en la política internacional con gran protagonismo. El emperador francés tuvo un papel destacado tanto en las unificaciones de Italia y Alemania como en la Guerra de Crimea (1854-56) o en la apertura del Canal de Suez (1869).

Otto Von Bismarck
  • De 1870 a 1890: la Europa de Bismarck.
Francia y Prusia entran en guerra en 1870. La nueva Alemania se configura con la anexión de los territorios de Alsacia y Lorena, desgajados de Francia. Esto será motivo de tensiones entre ambos países durante mucho tiempo y creará un deseo de revancha por parte de Francia.

Los intereses de las naciones europeas en este período son los siguientes:

  • Alemania pretendía el aislamiento de Francia en Europa y sobre todo que no se aliase con Rusia para evitar verse en medio de dos grandes potencias.
  • Francia deseaba el desquite por su derrota y recuperar Alsacia y Lorena. Para ello deseaba la alianza con Inglaterra (por su poder económico) y con Rusia (para envolver a Alemania)
  • Austria-Hungría y Rusia estaban enfrentadas por sus intereses en los Balcanes (territorio otomano). Las dos naciones se disputaban la salida al mar hacia el sur de Europa. Austria contaba con el apoyo alemán.
  • Inglaterra se mantenía a la expectativa (espléndido aislamiento). No le interesaban demasiado los asuntos del continente en tanto no afectasen a sus intereses económicos. Sobre todo seguía de cerca el crecimiento económico alemán pues podía poner en peligro sus hegemonía como potencia comercial.

Lejos de Europa también se producían fricciones entre naciones:
Japón buscaba su expansión territorial en el Pacífico a costa de Rusia.
En Africa ya vimos que las tensiones entre potencias coloniales producían una evidente crispación de las relaciones internacionales.

Con todo este escenario, Bismarck puso en marcha un entramado de alianzas y bloques que tenían como finalidad crear un equilibrio europeo favorable a Alemania, así como aislar a Francia.


2.- De la realpolitik a la weltpolitik.


2.1.- Los sistemas bismarckianos (La realpolitik). (Ver mapas)

Los Balcanes era una zona estratégica donde se producín fricciones entre las potencias, principalmente entre Austria y Rusia, aprovechando la debilidad del Imperio otomano. Gran Bretaña apoyaba a ese imperio frente a las pretensiones de aquellas potencias.

Primer Sistema Bismarckiano (1871-1879):
  • 1873: Acuerdo entre Alemania y Rusia; Acuerdo entre Austria y Rusia
  • 1873: Entente de los Tres Emperadores: Guillermo I (Alemania), Francisco José (Austria), Alejandro II (Rusia). Alemania se alía a Austria en 1871 y a Rusia en 1873 de forma individual en una alianza en la que los países se comprometían a la defensa mutua en caso de agresión de un tercero, así como el apoyo bélico si era Alemania la que atacaba al tercer país. Entre Austria y Rusia se creaba una entente que solo contemplaba el aspecto defensivo ante la agresión exterior.Objetivo: evitar la unión de Austria y Francia, los dos países derrotados en el proceso de unificación alemana. En 1874 se adhiere Italia.
  • Este sistema terminó con el Conflicto de los Balcanes (1877-1878): en Bosnia-Herzegovina y Bulgaria se producen revueltas nacionalistas contra Turquía. La represión del imperio otomano provocó la intervención de Rusia en apoyo de Serbia y Montenegro. Por el Tratado de San Stefano (1878) se crea un estado eslavo en los balcanes, la Gran Bulgaria, apoyada por Rusia. Esto suponía una ruptura del statu quo de esta sensible zona a favor de Rusia. Austria-Hungría y Gran Bretaña presionaron para revisar el tratado.
  • 1878: Congreso de Berlín: se revisan los acuerdos de San Stefano: se disuelve la Gran Bulgaria, Austria-Hungría se hace cargo de la administración de Bosnia-Herzegovina y Gran Bretaña recibe Chipre de mano de los turcos. Rusia es humillada, lo que le aleja de la Liga de los Tres Emperadores.

Segundo Sistema Bismarckiano (1879-1885):
  • 1879: firma de la Dúplice Alianza entre Alemania y Austria.
  • 1881: renovación de la Entente de los Tres Emperadores, con la vuelta de Rusia
  • 1882: Triple Alianza: Alemania, Austria-Hungría e Italia. Promesa de ayuda a Italia por parte de Alemania y Austria-Hungría en caso de un ataque francés.

Tercer Sistema Bismarckiano (1885-1893):

  • 1885: estallan nuevas rivalidades entre Rusia y Austria por el nombramiento de un rey proaustriaco en Bulgaria.
  • Bismarck consigue la firma de otros dos tratados:
  1. Tratado entre Alemania y Austria
  2. Tratado secreto de Alemania con Rusia (tratado de "reaseguro") sin conocimiento austriaco.

Los sistemas bismarckianos se mostraron eficaces durante los casi 20 años que duraron pues Alemania controló el ascenso de Francia de nuevo al rango de potencia europea durante ese tiempo mientras alentaba en ocasiones y en otras desarmaba conflictos y crisis, según su propia conveniencia.


2.2.- La caída de Bismarck y la política exterior de Guillermo II (La weltpolitik).

  • 1888: nuevo emperador alemán: káiser Guillermo II. Discrepancias con Bismarck.
  • 1890: dimisión de Bismarck. Puesta en marcha de la "weltpolitik" (política mundial) por parte del nuevo káiser: Competición con G. Bretaña por el dominio de los mares. Expansionismo naval alemán.


3.- La formación de los bloques.


Nueva situación política internacional:
  • Resurgimiento del nacionalismo francés.
  • Discrepancias entre Rusia y Alemania por el apoyo alemán a Austria en la cuestión balcánica.
  • Concordancia de intereses entre Rusia y Francia en rivalidad con la Triple Alianza. Inversiones a gran escala de Francia en la industrialización rusa. Préstamo francés a Rusia en 1888.
  • 1893: Alianza entre Francia y Rusia. De carácter secreto y defensivo: preveía el auxilio de Rusia en caso de que Francia fuese atacada por Alemania o Italia apoyada por Alemania, y el de Francia en caso de que Rusia fuese agredida por Alemania, o Austria-Hungría apoyada por Alemania.
  • Este acuerdo rompía la estrategia Bismarckiana de aislamiento francés y además envolvía a Alemania en caso de guerra con dos frentes abiertos en sus dos flancos.

De esta manera se definen los dos bloques de países: (Ver mapa)
  • Por un lado La Triple Alianza, también llamados Los Imperios Centrales: Alemania, Austria-Hungría e Italia. Este último país entró en la alianza por evitar su aislamiento internacional más que por convencimiento, pero la abnadonó tras la ocupación italiana de Libia, lo que la enfrentó con el imperio turco y Austria.
  • Por otro La Triple Entente: Francia, Rusia y Gran Bretaña. Formada en varias etapas:
  1. 1904: Firma de la Entente Cordiale entre Francia e Inglaterra.
  2. 1907: Rusia se incorpora a la alianza.
  3. Este acuerdo rompía la tradicional política de aislamiento por parte de Gran Bretaña. Este país estaba preocupado por el expansionismo naval alemán.


4.- Conflictos y crisis puntuales: el camino hacia la guerra.

El complejo sistema de alianzas hacía que cualquier conflicto, por limitado y puntual que fuese, tendría un alcance internacional, implicando a varias potencias.
  • 1903: Serbia: el rey Alejandro Obrenovicht es asesinado por sus simpatías austríacas. Es sustituido por el antiaustríaco Pedro I Karageorgevicht. Viena consideró desde entonces a Serbia como el adversario al que había que aniquilar.
  • 1905: Guerra ruso-japonesa. Derrota rusa. Alejada Rusia del Extremo Oriente, volverá a interesarse por los Balcanes. Serbia se encuentra con un protector frente a Austria.

Dos nuevos focos de tensión: Marruecos y la Península Balcánica:


4.1.- Las crisis marroquíes.

  • 1905: Primera crisis marroquí: El káiser Guillermo II hizo en Tánger unas declaraciones a favor de la independencia de Marruecos, cuando Francia ya tenía un plan de protectorado sobre el territorio. La Conferencia de Algeciras de 1906 dio la razón a las tesis francesas.
  • 1911: Crisis de Agadir: ante la intervención francesa en el interior de Marruecos, Alemania, considerando que se había violado el Tratado de Algeciras, envió un acorazado. Tras largas negociaciones hubo un acuerdo colonial franco-alemán. Francia cedió gran parte del Congo francés a cambio de una pequeña parte del Camerún alemán. Por su parte, Francia y España implantaron sendos protectorados sobre Marruecos en 1912.


4.2.- Las crisis balcánicas.

  • Desde 1830 el imperio turco había ido perdiendo territorios: Grecia, Serbia, Rumanía, Montenegro, Bulgaria, Bosnia-Herzegovina.
  • En 1878, por el Congreso de Berlín, se había encomendado la administración de Bosnia-Herzegovina al imperio Austro-húngaro. Esto despertaba recelos en Rusia, por su vieja pretensión de buscar una salida al mar por los Estrechos de los Dardanelos.
  • Por otra parte, la recién independizada Serbia deseaba crear la Gran Serbia, anexionándose territorios balcánicos.

Esto llevó a varias guerras en la zona:
  • 1908: Austria-Hungría se anexiona Bosnia-Herzegovina, apoyada por Alemania, a pesar de las protestas de Rusia y Serbia.
  • 1912: La Liga Balcánica, formada por Serbia, Grecia y Bulgaria, apoyadas por Rusia, expulsaron a los turcos de la zona, forzando al imperio otomano a reconocer la independencia de Albania.
  • 1913: La distribución de esta conquista entre esos pequeños países trajo diferencias entre ellos. Un asalto imprevisto de los búlgaros a los serbios, fue rechazado por Serbia, que se anexionó el territorio ante la indignación de Austria, que estaba muy preocupada ante el engrandecimiento serbio.Rusia acrecentó su influencia en la zona frente a las potencias austriaca y alemana.


5.- El rearme material y moral.

La época de la "paz armada" había sido aprovechada por todas las potencias europeas para hacer un esfuerzo a fin de intensificar su industria de armamento. Además, la industrialización y los avances técnicos trajeron consigo nuevas armas, como acorazados o aviones.

Ni Austria-Hungría, ni Serbia ni Rusia, eran países industrializados. Alemania sí lo era, y en una industria tan vital para la guerra como la del acero, casi triplicaba la producción británica.

En armamento naval, la Entente era superior: 108 acorazados y 169 cruceros frente a los 56 y 69, respectivamente, de los austro-alemanes.

Los aliados contaban con 230 aviones frente a los 174 de la aviación alemana. En cambio, en artillería pesada la ventaja alemana era abrumadora: 2.000 cañones frente a los 308 del Ejército francés.

Por lo que respecta al contingente humano, a pesar de los llamamientos pacifistas, sobre todo de los partidos obreros y la A.I.T., las opiniones públicas de los distintos países, exacerbadas por las proclamas nacionalistas y xenófobas, hacía tiempo que estaban entusiasmadas por la probabilidad de una guerra que todos presumían corta y victoriosa.

Entre 1910 y 1913 Alemania había instituido una Ley de Reclutamiento y Movilización que permitía asegurar un contingente de 8,5 millones de hombres. Además, la red alemana de ff.cc. aseguraba un rápido transporte de los ejércitos a las fronteras. Todo había sido calculado meticulosamente por el Estado Mayor.

Los Austro-húngaros estaban pobremente armados y la movilización de sus reservistas sería lenta e incompleta.

Los británicos no tenían servicio militar obligatorio y en caso de guerra debían recurrir al reclutamiento voluntario.

La inmensidad del imperio ruso, por su parte, así como la deficiencia de las comunicaciones, impedirían un rápido movimiento de tropas rusas.

En resumen: las fuerzas estaban bastante equilibradas en 1914: superioridad naval y numérica de la Entente; mayor capacidad de movimientos y superior potencia de fuego de los Imperios Centrales.


Asesinato del Archiduque Francisco Fernando en Sarajevo


6.- El estallido de la guerra.


La situación europea en 1914 era explosiva. Tan sólo hacía falta una chispa para hacerla estallar. Y ésta saltó el 28 de junio de 1914, cuando el heredero de la Corona austro-húngara, Francisco Fernando, inició una visita a la ciudad bosnia de Sarajevo. A su paso por las calles en coche descubierto, el heredero y su mujer fueron asesinados por el estudiante bosnio pro-serbio Gavrilo Princip, miembro de la sociedad secreta Mano Negra, partidaria de la Gran Serbia.

La noticia conmocionó a Europa. Los austríacos acusaron a Serbia de haber guiado la mano del asesino.

Este incidente aislado, que podía haberse resuelto por la vía diplomática, disparó el mecanismo de alianzas, acuerdos, ansias de revancha, recelos y resquemores de las potencias europeas, desembocando en una guerra generalizada en pocos días.

El gobierno austríaco envió un ultimátum al serbio. Casi todas las exigencias austríacas fueron aceptadas con una excepción: el permiso para que la policía y la Justicia austríaca investigara el atentado en la misma Serbia. Aún así esto no fue suficiente para parar los preparativos bélicos austríacos.

28 de julio: Austria-Hungría declara la guerra a Serbia.

30 de julio: como respuesta el zar ruso decreta la movilización general. Ante esto, Alemania envió sendos ultimátums a rusos y franceses. A los primeros, para que se estuviesen quietos; a los segundos, para que permanecieran neutrales ante un enfrentamiento ruso-alemán. Las respuestas no llegaron.

1 de agosto: Alemania declara la guerra a Rusia

3 de agosto: Alemania declara a guerra a Francia. Ese mismo día los alemanes invaden Bélgica.

4 de agosto: Gran Bretaña reacciona ante el atropello a la neutral Bélgica y declara la guerra a Alemania.

6 de agosto: Serbia entra en guerra con Alemania y Austria-Hungría con Rusia.

11 y 12 de agosto: Francia y Gran Bretaña declaran la guerra a los austríacos.



7.- El desarrollo de la guerra.


Esta guerra fue distinta a todas las anteriores por varios motivos:

Con razón fue llamada Iª Guerra Mundial pues implicó a territorios y países de todos los continentes. Aunque los principales contendientes era europeos y el teatro de operaciones se desarrolló básicamente en Europa, se proyectó también en las colonias africanas y de Oriente, y con la entrada de Japón y de EE.UU. en la misma, lo que era una contienda europea se convirtió en mundial.

Fue la primera guerra moderna, tanto por la entrada en juego de nuevos ingenios bélicos, como por la importancia numérica de los ejércitos y por las destrucciones generalizadas. Fue una guerra de masas, con millones de muertos y heridos y que implicó también a las poblaciones civiles.

Fue la primera guerra en la que la tecnología jugó un importante papel. Se emplearon nuevas armas, terribles y mortíferas: la aviación, la artillería pesada de gran alcance, las ametralladoras, los submarinos, los gases, los tanques...



Nuevos ingenios bélicos en la Iª Guerra Mundial

7.1.- Los contendientes.


La guerra puso en marcha el mecanismo de las alianzas forjadas con anterioridad a la misma con alguna excepción:

Por parte de los Imperios Centrales participaron los miembros de la Triple Alianza (Alemania y Austria-Hungría), con excepción de Italia, que se declaró neutral en un principio y un año más tarde decidió participar, pero contra ellos, por el contencioso que tenía con Austria-Hungría por territorios del norte de Italia. Posteriormente entraron en guerra a favor de los Imperios Bulgaria y el Imperio Turco.

Por parte de la Entente participaron en un primer momento G. Bretaña, Francia y Rusia. Serbia, debido al ultimátum austríaco. Bélgica se vio obligada a la lucha por la invasión de su suelo por los alemanes. Posteriormente se incorporaron Japón, Italia, Rumania, Portugal, Grecia y EE.UU.



7.2.- Los escenarios de la guerra. (Ver mapa)

A pesar de ser una guerra mundial, los escenarios de la contienda fueron relativamente limitados:

El frente occidental estuvo en el norte de Francia, donde tras un fulgurante avance de los alemanes a través de Bélgica, el ejército del káiser quedó clavado durante toda la guerra.

El frente oriental estuvo en Prusia, desde el norte hasta Ucrania en la frontera de Rusia con Austria.

Tras la entrada de Italia en la guerra se abrió otro frente en el norte entre Italia y Austria, de los Alpes a Venecia.

En los Balcanes la guerra se desarrolló entre el norte de Grecia y Serbia, y entre el norte de Rumania y el sur de Austria y en la costa del mar Negro en torno al Imperio ruso.

Fuera del continente ruso jugó un importante papel el británico Lawrence (Lawrence de Arabia), en Mesopotamia que agrupó a los árabes en su lucha contra los turcos.

La guerra en el mar, aunque secundaria, fue decisiva para el desenlace de la guerra, pues la decisión alemana de utilizar la guerra submarina a gran escala en el Atlántico para cortar el abastecimiento a los aliados precipitó a los EE.UU. a entrar en la contienda, inclinando la balanza decisivamente a favor de la Entente.


7.3.- Fases del conflicto.


La guerra de movimientos. (1914-15)

Según el plan Sclieffen elaborado por el Estado Mayor alemán, era precisa una guerra relámpago para llegar a París en pocos días, para después dedicarse al frente oriental, ya que se esperaba que la movilización e incorporación de las tropas rusas a la frontera sería más lenta. Por eso, antes incluso de declarar la guerra oficialmente a Francia, los alemanes invadieron Luxemburgo y en pocos días ocuparon Bélgica penetrando en suelo francés. Pero fueron detenidos en el Marne por el mariscal Joffre.

En el frente oriental la movilización rusa fue más rápida de lo esperado y el 20 de agosto un ejército alemán fue derrotado en Prusia. El general Moltke, alarmado, envió rápidamente varias divisiones del frente francés, aliviando la presión en el Marne y facilitando la victoria de Joffre. Alemania cosechó algunos éxitos en el contraataque a Rusia. Pero mientras tanto, en Galitzia los austro-húngaros fueron derrotados por los rusos y sorprendentemente, en los Balcanes los serbios recuperaron su capital frente a los austríacos.

Por lo tanto, el plan Schlieffen de guerra relámpago fracasó y Alemania se vio obligada a enfrentarse a lo que tanto temía: una guerra en varios frentes a la vez.



La guerra de posiciones. (1915-16)

Fracasado el plan de "guerra relámpago" todos los ejércitos se aprestaron a consolidar las posiciones ocupadas para enfrentarse a una guerra larga. Se cavaron trincheras que formaron un inextricable dédalo de pasadizos en los frentes.

Este sistema favorecía a los ejércitos que defendían las posiciones por lo que las ofensivas fracasaron en todas partes. Los frentes evolucionaron muy lentamente o permanecieron casi estacionarios.

Ambos bandos desarrollaron una estrategia de "punto débil". Convencidos de la inutilidad de grandes operaciones en frentes consolidados, los contendientes se limitaron a desencadenar cortas y sangrientas ofensivas. Pero todas fracasaron: los franceses detuvieron a los alemanes en Verdún; los alemanes detuvieron a los franco británicos en el Somme; los turcos hicieron fracasar el desembarco aliado en los Dardanelos y Gallípolli.

Este tipo de guerra, unido al empleo de armas nuevas agigantó los sufrimientos y las pérdidas humanas. La guerra se convirtió en una sucesión de sangrientos duelos de artillería seguidos por masivos y suicidas ataques de la infantería a las posiciones del enemigo. El empleo de esta táctica permitía la conquista de algunos kilómetros, a veces tan sólo unos centenares de metros, que podían perderse en la siguiente contraofensiva.


1917

Este año fue crucial en el desarrollo de la guerra y marcó el principio del fin de la misma debido a varios acontecimientos de suma importancia.

En Rusia la guerra provocaba cada vez un mayor descontento entre la población. El Ejército ruso estaba mal equipado y muchos soldados morían más por el frío y el hambre que por las balas enemigas. Cuando a estas circunstancias se unió un alza generalizada de precios, se desencadenó un movimiento de protesta que degeneró en revolución abierta. El 15 de marzo de 1917 el zar abdicó y se formó un gobierno provisional. Pero este gobierno continuó con la guerra. La desilusión del pueblo hizo que aumentara el malestar. Muchos soldados desertaban y volvían a sus casas y se produjeron sucesivas crisis de gobierno. El 7 de noviembre se produjo la revolución soviética. El 15 de diciembre se firmaba un armisticio en Brest-Litovsk previo a la Declaración de paz. La Rusia soviética abandonaba la guerra.

Revolucionarios rusos contra la guerra


Ante el impasse de los frentes los contendientes optaron por la guerra económica. Los aliados sometieron a las potencias centrales a un bloqueo económico. Como respuesta, los alemanes emplearon una nueva arma que iba a resultar de gran efectividad: los submarinos. La guerra submarina tenía como objetivo hundir a los navíos de guerra enemigos, pero también privar del aprovisionamiento a los aliados. Por lo tanto, los submarinos alemanes hundieron también navíos de carga de países neutrales que llevaban suministros a los aliados. El tráfico marítimo en el Atlántico se paralizó, lo que ocasionaba grandes pérdidas a la economía norteamericana, principal exportadora a Europa. El Alto Mando alemán era consciente de que su táctica iba a obligar, tarde o temprano, a los EE.UU. a entrar en la guerra. Pero confiaban en que ésta hubiera terminado, con su victoria, antes de que tal cosa sucediera. Animaba esta creencia el hecho de que se hubiera producido la revolución en Rusia que conllevaba la firma del armisticio por este país.

Dos hechos forzaron la declaración de guerra de EE.UU. en la primavera de 1917: el primero fue un telegrama alemán, captado por los británicos, en el que el Secretario de Estado alemán, Zimmermann, (VerTexto) ofrecía al gobierno mexicano la devolución de territorios anexionados por los norteamericanos (Texas, Nuevo México y Arizona) a cambio de su alianza en la guerra. Este telegrama es objeto aún hoy de controversia sobre su autenticidad. El segundo fue el hundimiento de un mercante estadounidense por un submarino alemán. Esto obligó al presidente Wilson a declarar la guerra a los imperios centrales el 2 de abril de 1917.

Marines estadounidenses parten hacia la guerra


8.- La guerra en la retaguardia.


Cartel de propaganda de la Cruz Roja durante la guerra


8.1.- La movilización económica.


La Iª guerra en sentido moderno de la historia implicó también a las retaguardia. El desplazamiento de millones de hombres a los frentes de guerra implicó un gran esfuerzo de organización. Por lo tanto, fue preciso también acometer una movilización de los recursos económicos.

  • Utilización de las redes ferroviarias para abastecer de hombres y pertrechos al frente.
  • Sustituir la mano de obra movilizada en el frente por población civil en las fábricas, principalmente mujeres.
  • Regular el consumo mediante controles y cartillas de racionamiento ante la escasez y el encarecimiento de víveres.
  • Sufragar el gasto de la guerra mediante la petición de créditos, sobre todo a los EE.UU.


Cartel pidiendo la compra de bonos para sufragar la guerra
  • Intervencionismo estatal: el Estado intervino en la dirección económica de los países, fijando precios, regulando el mercado, orientando la producción. Esto acababa con el principio liberal de "laissez faire" e iba a marcar el principio económico que fue imperante en gran parte de Europa durante la segunda mitad del siglo XX.


La guerra convulsionó la economía de los países: el territorio más industrializado de Francia fue ocupado por los alemanes. Gran Bretaña hubo de pedir numerosos créditos a los EE.UU. Alemania sufrió los efectos del bloqueo económico.

La guerra trajo consecuencias económicas también a los países neutrales, esta vez de tipo positivo: ante la escasez de materias primas y productos industriales y el estrangulamiento de las economías de los países contendientes, éstos dependieron en exclusiva de los aprovisionamientos de países neutrales, que dominaron el comercio y además pudieron encarecer sus exportaciones. Es en este momento cuando se produce el despegue industrial de España en la industria pesada, la marina mercante y el sector textil.

Pero la economía que salió más fortalecida por la guerra fue la de EE.UU, que desde entonces se convirtió en la gran potencia económica mundial.


Soldados del cuerpo sanitario alemán con una ambulancia

8.2.- El apoyo moral.


Poco a poco la masiva adhesión inicial con la que contó la guerra fue enfriándose, debido a las penalidades de los combatientes en las trincheras y las continuas masacres de las inútiles ofensivas y contraofensivas.

La Internacional socialista, si bien había fracasado en el primer momento en su intento de detener la guerra, convirtiéndola en una revolución mundial, poco a poco fue ganando adeptos en su seno la idea de una paz sin anexiones ni indemnizaciones(derrotismo revolucionario). Esto aumentó después de la Revolución rusa y la paz de Brest-Litovsk.

La indisciplina militar y los llamamientos cada vez más amplios, a la terminación de la guerra trajeron como consecuencia la toma del poder en la mayoría de los países por parte de los sectores más recalcitrantes y partidarios de la misma. Los parlamentos perdieron parte de sus atribuciones y la mayoría de países de hecho se vieron sometidos a dictaduras de guerra (generales Hindenburg y Ludendorff en Alemania, Clemenceau en Francia, Lloyd George en G. Bretaña). Estos políticos mantuvieron la guerra a ultranza frente a las peticiones de paz o armisticio.

Los soldados leen cartas de sus familiares en la trinchera


9.- El final de la guerra.

Desde finales de 1917 a finales de 1918 los acontecimientos se precipitaron y el equilibrio de fuerzas se rompió definitivamente. Si por un lado el abandono de Rusia dio a los imperios centrales la posibilidad de ganar la guerra derrotando a Francia y G. Bretaña antes de que entrasen los EE.UU en liza, la llegada de éstos logró imponerse finalmente y la derrota de la alianza austro-alemana precipitó e final.

Las razones de la derrota de los imperios centrales fueron varias:

  • Sin duda, la entrada de EE.UU. en la guerra, que aportaron refuerzos bélicos y un inmenso arsenal.
  • La descomposición del imperio austro-húngaro, en el que se evidenciaron los nacionalismos disgregadores de checos, eslavos del sur, rumanos y húngaros, que proclamaron o anunciaron la independencia de sus nacionalidades.
  • El rechazo a la política militarista de Hindemburg y Ludendorff en Alemania, lo que llevó a la revuelta en Berlín , la abdicación del káiser y la proclamación de la república. Esto hizo que, aunque fueron los militares quienes pidieron el armisticio, éste fue firmado por el socialdemócrata Ebert, que había tomado el poder tras la revolución. Por lo tanto, esto fue el origen del mito de la "puñalada por la espalda" que atribuyeron los militares a los políticos de la República de Weimar, y que sería alimentado después por los nazis.

Se sucedieron los armisticios por parte de los contendientes de los imperios centrales. Alemania firmó el 11 de noviembre de 1918 y tuvo que entregar a los aliados la marina de guerra, la aviación y el armamento pesado. Sin embargo, en un primer momento, Alemania no fue ocupada por el enemigo ni hubo devastaciones ni venganzas por parte de los vencidos.



10.- El balance de la guerra. (Ver gráfico)



El largo conflicto provocó terribles pérdidas demográficas.

Alrededor de 10 millones de muertos en los frentes.

Alemania perdió 1.800.000 hombres; Francia 1.400.000; el Reino Unido 700.000. Rusia fue la que más sufrió con casi 3 millones, más casi el doble de muertos en la guerra civil sufrida tras la revolución. (Aquí puedes ver un cálculo detallado)

A estas pérdidas hay que añadir los varios millones de heridos, mutilados y afectados por los gases.

Las destrucciones materiales fueron intensas, sobre todo en Francia. Tres millones de has. fueron afectadas, la red ferroviaria interrumpida, los puentes y miles de construcciones destruidos.

El coste de la guerra supuso para Francia el 30% de su riqueza nacional, para Alemania el 22%, para Inglaterra el32%, para Italia el 26%, para los EE.UU el 9%.

Hubo cambios institucionales, debido a revoluciones políticas en aquellos países vencidos: Alemania (República de Weimar), Hungría (Bela Khun), Turquía...

Aparecieron nuevos estados nacionales con la independencia de las nacionalidades: Checoslovaquia, Yugoslavia...

La guerra debilitó el poder económico europeo y los EE.UU se convirtieron en la primer potencia económica mundial. Los países europeos contrajeron con los EE.UU una deuda superior a los 10 mil millones de dólares en 1919.

Por otro lado también hubo consecuencias sociales: la incorporación de la mujer a una serie de trabajos hasta entonces monopolio masculino se intensificó. Con el tiempo se reconocieron sus derechos políticos (en 1918 tuvieron el derecho de voto en G. Bretaña). Aparecieron nuevos ricos, fabricantes de armas y especuladores que amasaron grandes fortunas. Surgió el tipo humano del excombatiente, nostálgico del peligro, incapaz de reintegrarse a la sociedad y la vida normal y que constituirá la base de movimientos hipernacionalistas y revanchistas como el nazismo.


11.- Las revueltas sociales.


Con el fin de la guerra varios países europeos, sobretodo los que habían sido vencidos, se enfrentaron a revueltas sociales, guerras civiles y revoluciones. Los efectos económicos de la guerra fueron muy dolorosos y se hicieron sentir en forma de paro y empobrecimiento general de la población. Además el ejemplo de la revolución soviética rusa cundió en otros países.

En Alemania, tras la proclamación de la república, las tensiones entre los socialdemócratas que ahora gobernaban y socialistas partidarios de los soviets (los espartaquistas de Karl Liebknecht y Rosa Luxemburgo) terminaron en guerra civil. La revuelta fue aplastada por el gobierno y los militares en enero de 1919, y los cabecillas fueron eliminados.

Tropas preparadas para aplastar la revolución espartaquista en Alemania

En Hungría, ahora desgajada de Austria, sí triunfó una revolución bolchevique, comandada por Bela Khun, en 1921. Se establecieron soviets. Pero la revolución fue aplastada poco tiempo después por fuerzas militares.

También hubo revueltas en otros países, incluso en los que habían permanecido neutrales como España. En estos casos se mezclaba el ejemplo soviético con la reconversión de sus economías al caer sus exportaciones a los antiguos beligerantes con la llegada de la paz.


12.- Los nuevos gobiernos.


En la mayoría de los países europeos triunfaron tras la guerra las opciones políticas reformistas de izquierda. Los gobiernos cayeron en manos de socialdemócratas o laboristas .Esto era consecuencia de un cambio económico: se abandonaba el liberalismo a ultranza y se admitía el intervencionismo estatal en la economía y la planificación. Este tipo de intervencionismo también se dio en las opciones fascistas como la italiana.


13.- La organización de la paz.


Firma del Tratado de Versalles en el salón de los espejos


13.1.- El Tratado de Versalles.


En enero de 1919 se reunía en París la Conferencia de Paz que habría de poner punto final a la Primera Guerra Mundial. Se reunieron 32 naciones beligerantes, pero excluyendo a las vencidas. La paz, pues, fue una cuestión de los vencedores. Las grandes decisiones fueron tomadas por el llamado "Consejo de los cuatro", integrados por Lloyd George (G. Bretaña); Clemenceau (Francia); Orlando (Italia) y Wilson (EE.UU.)

Los vencidos no fueron escuchados, y sólo se les convocó para entregarles los borradores de los tratados ya acordados y para su posterior firma. Si unimos a esto que los franceses impusieron la firma de la paz a Alemania en el Salón de los Espejos de Versalles, el mismo lugar donde en 1871 se había firmado el fin de la guerra franco-prusiana que dio lugar al Reich alemán, podemos hacernos una idea del carácter revanchista y humillante de estos tratados.

Este fue el origen del llamado "Diktat" de Versalles que creará un amargo rencor en Alemania y a no sentirse moralmente obligada a su cumplimiento.


La Paz de París está formada por cinco tratados de paz más el Pacto de la Sociedad de Naciones:

  1. Tratado de Versalles con Alemania (28 de junio de 1919)
  2. Tratado de Saint-Germain con Austria (10 de septiembre de 1919)
  3. Tratado del Trianon con Hungría (4 de junio de 1920)
  4. Tratado de Sevres con Turquía (10 de agosto de 1920)
  5. Tratado de Neully con Bulgaria (27 de noviembre de1920)


La Paz de París aspiraba, en principio, a reconstruir una Europa fundada sobre la libre determinación de las nacionalidades y a instaurar un nuevo orden internacional basado en el arbitraje colectivo que rechazara la vieja diplomacia secreta y afirmaba la supremacía del derecho internacional sobre el nacional. Sin embargo, en la realidad, los vencedores se inclinaron por explotar al máximo su victoria.

Se dieron también divisiones entre los vencedores, que aspiraban a conseguir satisfacciones diversas.

Se creó un instrumento para garantizar la paz, la Sociedad de Naciones. Pero no se permitió la entrada de Alemania, por juzgarse causante de la guerra, ni de Rusia, que tras la revolución bolchevique se veía envuelta en una guerra civil con los contrarrevolucionarios ayudados por tropas aliadas. Pero tampoco EE.UU, que había propugnado ese organismo, formó parte del mismo, al rechazar el Congreso de EE.UU. la propuesta de Wilson de integración y optar por el aislacionismo.

Cada uno de los países vencedores tenía una visión distinta sobre cómo debía ser el mapa de la postguerra europea:


  • El presidente de EE.UU. Woodrow Wilson pretendía que se aprobasen 14 puntos que consideraba imprescindibles para alcanzar una paz duradera en Europa. Entre ellos estaba el respeto al principio de las nacionalidades y la creación de un organismo supranacional que se encargase de llevar a cabo acuerdos entre las potencias a la vista de toda la comunidad internacional: la Sociedad de naciones (SDN).
  • El francés George Clemenceau pretendía tomarse la revancha frente a su enemiga Alemania sobre la humillación sufrida en 1871. Francia se anexionó Alsacia y Lorena, pero también pretendía llevar su frontera hasta el Rhin para crear fronteras naturales y debilitar económicamente a Alemania, ya que tanto el Sarre como la Renania Occidental constituían regiones económicas de primera magnitud. Los aliados rechazaron las pretensiones francesas y dieron el territorio a la SDN para que lo administrase provisionalmente.


  • El británico Lloyd George ponía el acento en el futuro del imperio otomano y quería aparecer como el árbitro de la situación en Oriente Medio, donde consiguió dominios sobre esos territorios.
  • El italiano Orlando salió frustrado de la Conferencia pues no fueron atendidas sus demandas sobre los territorios adriáticos, en especial sobre Albania. Esto será también motivo de conflictos futuros. Italia se consideró también engañada en Versalles.


13.2.- La cuestión de "las reparaciones".


Alemania perdió parte de sus territorios anexos a Bélgica que pasaron a ésta. Perdió también el Schlewig a favor de Dinamarca. Se construyó una Polonia independiente a costa de parte de Prusia y Rusia. Estas últimas pérdidas les parecieron intolerables a los alemanes.

No sólo se trataba de recortar el mapa alemán sino también de que no pudiese repetirse lo sucedido en el futuro. Y aquí es donde vinieron las discusiones más fuertes del tratado: se consideró a Alemania la culpable moral de la guerra. Se la obligó por lo tanto a una reducción de su poderío bélico y a pagar "indemnizaciones de guerra":

  1. Reducción del ejército alemán a 100.000 hombres.
  2. Fue privada de artillería pesada, aviación y marina.
  3. La orilla izquierda del Rhin fue ocupada durante 15 años y desmilitarizada la derecha.

La ocupación militar por Francia fue un instrumento de presión para pagar las reparaciones de guerra.

Los alemanes rechazaron tanto la idea de la culpabilidad como el monto de las reparaciones, que fue abusivo. Los aliados amenazaron entonces con la ocupación de la industrial cuenca del Ruhr lo que obligó a los alemanes al pago.


13.2.- El nuevo mapa de Europa. (Ver mapa)


Europa central y balcánica se dividió en Estados nacidos de las ruinas del imperio austríaco:

Hungría se redujo. Se prohibió expresamente la unión de Austria con Alemania (Anchluss); una y otra perdieron su acceso al mar.

Polonia fue reconstruida, Rumania aumentada.

Nacieron Checoslovaquia y Yugoslavia.

Italia recibió el Trentino, Istria y Trieste, pero no Albania.

Turquía se vio reducida al Asia Menor y a un pequeño territorio europeo en torno a Estambul. La zona europea de la Tracia se incorporó a Grecia

El resto del imperio turco se dividió:

Arabia bajo la administración de la SDN.

Siria bajo administración francesa.

Mesopotamia y Palestina bajo administración de Inglaterra. Consolidaba así su presencia en el Próximo Oriente dominando su ruta terrestre hacia la India y pasando a controlar importantes recursos petrolíferos.

El mapa de Europa que resultó de Versalles fue disparatado y creó una serie de cuestiones abiertas. El desmembramiento del imperio Austro-húngaro no resolvió el problema de las nacionalidades, sino que lo multiplicó con la creación de nuevas naciones. Había importantes minorías nacionales dentro de los nuevos estados: los sudetes (alemanes) en Checoslovaquia, alemanes en Rumania o Polonia, magiares en Rumania o Checoslovaquia. Además, el hundimiento del Imperio Austro-húngaro, la debilidad de una Rusia aislada por un cordón sanitario de Estados tapón y el hundimiento del imperio otomano rompieron el equilibrio europeo de las grandes potencias europeas que funcionaba desde el S. XVIII. Ahora sólo quedaban dos: Francia e Inglaterra.

13.3.- La paz en las colonias.

Tras de la guerra se produjeron también importantes cambios en las colonias. Se estableció el sistema de mandatos, mediante los cuales se atribuían a potencias europeas la administración de los territorios bajo el auspicio y la tutela de la SDN.

La asignación más importante de territorios por su valor estratégico y por sus consecuencias para un futuro que llega hasta la actualidad fue el reparto del Oriente Próximo, como consecuencia del hundimiento del imperio turco. La política seguida con este reparto creó una gran inestabilidad.

Se crearon zonas de influencia en la zona para Francia (Líbano y Siria) y G. Bretaña (Irak y Transjordania)

Se creó un estado árabe independiente en la Península Arábiga (Arabia Saudí)

Se prometió al movimiento sionista internacional, por la Declaración Balfour, la creación de un "hogar nacional judío" en Palestina, ocupada por musulmanes. Se trataba de atraerse los capitales de los banqueros judíos norteamericanos (Rothschildt). Esto será el origen del problema actual entre judíos y palestinos.

14.- La Sociedad de Naciones.

La Iª Guerra Mundial había demostrado que los sistemas reguladores de la vida internacional, primero el de Congresos propuesto en Viena en 1815, luego el de bloques inspirado por Bismarck, no habían puesto fin a la guerra entre las naciones. Por lo tanto, era preciso encontrar un sistema arbitral.

Woodrow Wilson diseñó una organización internacional con participación de todas las naciones que garantizara la paz en el mundo. Así, el Tratado de Versalles recogió en su articulado el Pacto de la Sociedad de Naciones, que entró en vigor el 10 de enero de 1920.

La nueva institución se proponía el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales. Aunque no prohibía el recurso a la guerra, los estados miembros asumían ciertos compromisos de agotar primero todos los procedimientos pacíficos de solución de los conflictos y establecía sanciones económicas y militares contra los estados agresores.

Con sede en Ginebra la SDN se estructuraba en los siguientes organismos:

Asamblea General de todos los estados miembros, que se reunían anualmente.

Consejo de nueve miembros, de los cuales cinco eran permanentes.

Secretario General.

Tribunal Internacional de Justicia (en La Haya)

Oficina Internacional de Trabajo (OIT) encargada de defender los intereses de los trabajadores por medio de convenios internacionales.

Aunque se proponía ser una organización universal, la primera ausencia importante fue la de EE.UU. vetada por el Congreso estadounidense.

Los aliados se opusieron también al ingreso de Alemania hasta 1926; la URSS no fue admitida hasta 1934. Alemania y Japón se retiraron de la SDN en 1933, Italia en 1937. La URSS fue expulsada en 1939.

La SDN no consiguió evitar las anexiones ni las tendencias expansivas de los estados totalitarios, ni impedir la nueva conflagración mundial en 1939. Sin embargo constituyó una nueva experiencia en la búsqueda de un nuevo orden mundial y algunas de sus instituciones subsistieron en la O.N.U. de la segunda postguerra.

lunes, 2 de marzo de 2009

Mapa del reparto de África

En la Conferencia de Berlín se reunieron las grandes potencias para repartirse el continente africano en zonas de influencia que fueron colonizadas posteriormente. Aquí puedes ver cómo quedó el mapa de África tras el reparto (hacia 1914)